En las últimas semanas nos hemos enterado de una serie de protestas en Irán luego del fallecimiento de Mahsa Amini, quien había sido detenida por la policía de la moral del país. Si bien desde occidente se habla de que su detención tenía que ver solo con el mal uso de su hiyab, para Camila Stipo, investigadora de este tema, hay más dimensiones detrás de las manifestaciones en el país.
«Algo que está pasando invisibilizado es que la mujer era kurda y los kurdos son un grupo étnico socialmente marginado, discriminado y con leyes que aplican de forma diferenciada en Irán», explica Camila. Agrega que en las protestas, las mujeres gritan «mujer, vida y libertad«, que es el lema de las mujeres en todo el Kurdistán. «Con ese lema le han estado resistiendo al estado islámico por mucho tiempo. Es reduccionista creer que esto es solo por el hiyab, la cuestión se gatilló por eso pero no es la única dimensión«, agrega.
¿Por qué caemos en esa visión reduccionista? La historiadora explica que desde occidente vemos al oriente como algo retrasado y barbárico, lo que «es problemático porque en Latinoamérica no vivimos situaciones tan diferentes». Como ejemplo, Camila Stipo señala que el caso de Joane Florvil fue hace solo cinco años y que su muerte también fue consecuencia de una estructura racista y patriarcal. «No quiero minimizar lo que ocurre en Irán, pero aquí trae réditos decir lo mal que están los otros y lo bien que estamos acá, que acá hay que quedarse calladas por cómo están en otros lados«, señala Stipo.
La investigadora Camila Stipo respondió en el panel feminista la pregunta al lugar que ocupa la mujer en el Islam, el cual según su visión, va a depender de la interpretación y las expresiones sociales de dónde es profesado. «Hay países donde el Islam ha sido instrumentalizado y politizado para la dominación política y social, ahí las mujeres ocupan un lugar relegado con leyes súper opresivas», explica.
Entonces, no hay una respuesta clara al lugar de la mujer en el Islam, porque dependerá de las distintas interpretaciones, escuelas, expresiones sociales y utilizaciones políticas. «Lo que si quiero decir es que definitivamente lo que está pasando en Irán no tiene que ver con el Islam«, dice Camila Stipo.
Una de las formas de lucha de las feministas islámicas, explica la historiadora, es que ellas interpretan de otra forma el Corán (libro sagrado del Islam). «Ellas consideran que el mandato divino, que es usar la razón y no solo obedecer a estas estructuras (…) Ellas dicen que el papel de la mujer en el islam es central, es fundamental, es igualitario y liberador«.
Finalmente, Camila Stipo hace un llamado a estar pendientes de la situación en Irán, pero a cuestionarnos lo que sucede en nuestro entorno cercano, ya sea Chile o Latinoamérica. «Irán es un país de 90 millones de personas con una historia de luchas, son fuertes, ¿qué podemos hacer nosotros desde acá? (…) Si tienes una urgencia de hacer un bien en el mundo, cruza la puerta de tu casa«, concluye.